martes, 17 de julio de 2012

RdM - Chango: Match Point

Domingo 15 de julio, frío invernal acorde al calendario. 11 AM y el torneo que año a año nos desvela, nos convocaba para jugar un hermoso partido de fóbal. Chango era el rival, viejo conocido de nuestra camada, compañeros de claustro para aquellos que teníamos la dicha de ir a la tarde, y rivales reiterados en las diversas olimpíadas. Quienes íbamos a la 7ma, y formamos el esqueleto de este querido Resto del Mundo, ostentábamos hasta este partido un invicto de 12 años, que incluía casi todas victorias, memorables partidos, y un antecedente cercano: 3-0 en la cancha 2 en el torneo 2011, con un golazo de volea de Alejo y dos del Tierno Haedo, hoy purgando su última fecha de la suspensión que el riguroso Tribunal de Disciplina impuso, con la clara intención de minar el camino de RdM hacia el Scudetto. Lo de siempre, los poderosos jugando contra los intereses de los más populares.
La lesión de Javi y la ausencia de los Santiagos, obligaba a formar con los únicos 9 jugadores disponibles. Alca en la valla. Musgo, Chulo, Ricky en el fondo. Casta, Bollo, Boto. Fran y Alejo en la delantera. Sorteo, pitazo e inicio de la contienda en la cancha 2 madereña. La primera jugada del partido sirvió para una cosa: darnos cuenta de que Musgo no podía más. A los 15 segundos de juego, el número 26 sintió una fuerte molestia en uno de sus aductores, que lo venía acompañando desde hacía unos días, y de ahí en más continuó el juego con dificultad para moverse (un poco más de la habitual). Los primeros minutos fueron la única muestra que veríamos del partido que teníamos proyectado. Chango intentaba manejar la pelota, con toques de balón entre sus mejores hombres, y Resto cortaba y salía. Así, en una primera aproximación, este cronista recupera por derecha, avanza unos metros, y juega a la izquierda para la entrada del Amigo de los Niños, que remata de primera con zurda, potente pero por arriba del travesaño. Buen disparo y buena aproximación.
Pocos minutos después, pelota del equipo verde atrás de mitad de cancha. El pelotazo sale largo hacia la izquierda, y es recibido por un delantero que, mano a mano (sí, mano a mano!) con Peralt, la domina, gira hacia el medio, dejando desairado al zaguero, y cara a cara con el Yosapa define suave al descuidado primer palo. Gol, 0-1 tempranero, y se caía la estantería de lo que se había planeado en la previa. Resto del Mundo acusó el golpe, y Chango, que hasta aquí sólo había hecho el gol, comenzó a justificar su ventaja con buen juego. Pocos minutos después, una jugada que comenzó por izquierda terminó en la derecha, y en el último pase a espaldas del defensor, para que el volante izquierdo imitador de Erviti enfrentara nuevamente al Alca, y pese a definir al bulto y mal, la pelota diera en las manos del guardameta, picara y entrara mansamente decretando el lapidario 0-2. En 10 minutos, la cosa había pasado de peluda a negrísima.
Resto del Mundo se tenía que despertar para intentar una posible reacción, o por lo menos no comerse una goleada que podía ser histórica. Y así lo hizo, pese a seguir siendo víctima del toque que proponía el rival, con claro dominio de la posesión. Fue a través de la pelota parada que RdM se aproximó en esta primera etapa. Un córner, un par de tiros libres, demostraban que en el área contraria los hombres de blanco y negro podían imponerse con facilidad. En defensa, la línea de 3 había comenzado a hacer pie (lástima que estábamos ya 0-2 pero bue) y el equipo no sufría más ocasiones de peligro. Casta llevó peligro con un remate desde afuera entrando por derecha, tras una buena habilitación de Fran. Pitazo y cierre del primer período.
Algunos jugadores se mostraron contentos en el entretiempo, por estar con el mejor resultado del Narigón, mientras otros discutían especialmente por la jugada del primer gol.
El segundo tiempo comenzaba y Resto tendría que cambiar la actitud e ir a buscar un descuento rápido para no dejar pasar el tren del partido. Alejo pivoteó cuanto pudo, Fran se las rebuscó para llevar peligro, y los volantes intentaron construir juego para acercarse al arco rival. Un tiro desde la esquina derecha cayó al segundo palo para la entrada franca del rengo Musgo, quien tras empujar decorosamente a su marcador y cabeceó con comodidad al gol...eso desde mi perspectiva de ejecutante del córner, porque en realidad la pelota se escapó a escasos centímetros del palo, y así Resto se perdió increíblemente el descuento en la primera. Chango parecía sin nafta y Resto se envalentonaba. Tras recuperar una pelota, el cronista abre juego a la izquierda para Boto, que con lucidez cambia de frente para la escalada de Musgo. El centro bajo penetra el área como un puñal, y con el arquero ya vencido y como principal espectador, Fran madruga a la defensa y se arroja en la boca del arco para empujar la pelota. Inexplicablemente, el 9 hace contacto con la bocha, que se pierde por arriba del travesaño y ahoga una vez más el grito restista. El descuento estaba al caer, se presentía, y con él los fantasmas y la posibilidad de un empate al alcance de la mano, que a esa altura significaba una victoria. Musgo, que no podía más con su alma pero hacía un esfuerzo sobrehumano por seguir llevando el partido adelante, mete un buen pase filtrado entre varias piernas para un servidor, que recibe de espaldas por el medio, se acomoda, se da vuelta, y en vez de fusilar desde la clara posición de gol que tenía en la puerta del área, busca un toque por arriba del arquero, que no estaba adelantado, y por eso controló sin problemas.
Pero de tanto ir, ir e ir, con más corázon y vergüenza que argumentos, Resto llegaría al ya merecido gol. Tiro libre desde la izquierda, centro que cae al corazón del área, donde duele, a espaldas de los defensores, y el Amigo de los Niños que está vez sí, conecta un frentazo cruzado y pone el partido 1-2. Grito moderado, más que de gol, de guerra, por lo que se venía. Y no nos vamos a mentir. Si cuando metieron el primer gol, todos pensamos "lo perdimos", gol este descuento con 10 largos minutos todavía por jugar, no hubo nadie que no pensara que lo empatábamos -y, quien te dice.... Sin embargo, Chango salió del sopor en el que entró a jugar la segunda etapa. Musgo quien a esta altura si no era un poste es porque los postes suelen ser más finitos, fue a jugar de 9 y Boto completó la zaga. Un delantero rival giró muy bien y escapó a la marca del Chulo por primera vez en el partido, definió fuerte de zurda obligando a una buena estirada del Alca, y a que Boto complete al corner ante la entrada de otro rival. Alejo probó desde lejos, la pelota se desvió y pareció complicar al arquero, pero finalmente contuvo sin problemas. El partido ahora era de ida y vuelta. Resto estaba a un gol de un empate impensado media hora atrás, y Chango buscaba liquidar el partido para no sufrir más. Lateral desde la derecha para los verdes. La pelota pica, Ricky duerme, el delantero lo anticipa y, en un mismo movimiento, gira y saca un latigazo de derecha que deja a Alca mirando cómo la pelota se clava pegadita al travesaño, infla las mallas y hunde a Resto del Mundo en una impotencia definitiva. 1-3, doblete para el rubio delantero, y partido liquidado, con menos de 10 minutos por jugar.
Pese a quedar pocos minutos y a saber que a esa altura la derrota era cosa juzgada, Resto siguió probando. Tres tiros de esquina, uno que dio en el palo y se perdió en el saque de arco, y otro que Fran fue a buscar de anticipo al primer palo, casi se convierte en el segundo gol de no ser por la oportuna intervención del arquero, y porque Boto envió el rebote a la estratósfera, fueron chances se acortar diferencias una vez más. Quien suscribe también buscó el arco desde la mitad de la cancha, obligando al arquero a no complicarse y sacarla por arriba del travesaño.
Así llegó el final. Derrota para Resto del Mundo, dolorosa, que reduce las chances de dar la vuelta olímpica a un hipotético sprint épico que recordaríamos por nuestras vidas. Final de un invicto de más de una década frente a un rival que tantas satisfacciones nos dio en época escolar, e incógnita acerca del rendimiento del equipo. La situación fue límite, con 9 jugadores, 2 de ellos con evidentes problemas físicos que no les permitieron actuar al 100%, y ausencias importantes por suspensiones y lesiones. Así, se nos fue todo el margen que pudimos tener. Ahora habrá vacaciones de invierno, recuperaremos a Pablo, a Javi de su lesión, y se irán los problemas físicos de Peralt y de Musgo. Todo mientras esperamos retorno con gloria de Manu y del Cabe de sus respectivos interminables viajes. Con todos los soldados presentes en cuerpo y en plenitud, con la mentalidad puesta en no cometer errores y en brindarse íntegros por esta noble causa, el milagro es posible. Quedan 4 partidos, y depende exclusivamente de nosotros.



Uno x Uno:

Alca (4,5): descuidó mucho el primer palo en el 1-0, y podría haber hecho algo más en el segundo. Nada que hacer en el fusilamiento del tercer tanto.

Musgo (4): todo el partido en una pata, con mucho corazón y hasta con recursos pese a sus limitaciones, pero se desordenó e hizo lo contrario a lo hablado en la previa en la jugada del 1-0, decisiva en el resultado.

Chulo (4): diezmado, le costó hacer pie. Pasó de largo en el 1-0 (muy raro en él) y no pudo ordenar la defensa.

Ricky (4): algunas pifias con su sello, otras jugadas bien resueltas, pero muy flojo en la marca del tercer gol. Se dejó madrugar por un delantero que estaba atrás de él, y luego perdió en el roce.

Casta (5): trató de jugar, se involucró y ayudó en la marca a Musgo cuando éste ya no podía más. Aceptable partido.

Bollo (6,5): intentó poner su cuota de garra y futbol. Ganó más de lo que perdió y a través de sus pases y pelotas paradas generó la mayoría de las situaciones del equipo.

Boto (5,5): alternó buenas y malas con la pelota, pero se sacrificó y buscó el desborde por su sector. Tuvo una al final.

Alejo (5,5): pivoteó, animó a sus compañeros constantemente. Luchó más de lo que jugó, pero buscó asociarse con Fran y por momentos lo consiguió.

Fran (6,5): bastante solo arriba, se mostró picante. Se las ingenió para llevar peligro. Tuvo 3 chances claras, convirtió una. Fue la principal carta de ataque.

Hinchada: el Tierno cumpliendo su último partido en exilio deportivo y la reaparición de la barra (JC).

1 comentario:

Unknown dijo...

tenemos 3 semanas para ponernos a punto.. todo depende de que todos y cada uno esté en su mejor estado posible