viernes, 22 de agosto de 2008

RdM – Chiribabuza: Derribando mitos, haciendo historia

Por fin el prolongado receso llegaba a su término, y en este fin de semana largo del mes de Agosto, Resto del Mundo debía afrontar en día lunes su séptimo partido por el torneo que nos compete. La hora señalada eran las 17 (último turno), y el rival un viejo y no muy grato conocido: Chiribabuza. Equipo ante el que Resto del Mundo cosechaba numerosos y decepcionantes antecedentes. Ya en la época colegial el destino nos había cruzado en un partido amistoso, que resultó baile y debut en la cueva (que jamás abandonaría) del Chulo Peralta. En ex alumnos, 3 enfrentamientos, registrando 1 empate y 2 derrotas cuando ambos militábamos en la tercera categoría. Sin duda, nuestra bestia negra del torneo. Teniendo en cuenta estas efemérides (ya sé que significa otra cosa, pero no encontraba la palabra), Resto tenía la dura misión de torcer la historia, y de continuar su senda firme en la cima del fútbol maderense. Para ello, debía obtener no menos que los 3 puntos, que le permitieran conservar la diferencia con sus perseguidores, o aumentarla en el caso de ciertos equipos que ya se sabía, habían perdido puntos. No obstante, no sería una faena sencilla. A la confirmada ausencia por un par de encuentros del rompecorazones criollo, de la persona de alma más aniñada del plantel a causa de motivos profesionales, se le sumaba la dilatada espera del pCm, también conocidos como Los Fernandos, quienes ya con el juez realizando el sorteo, todavía no habían ni pintado por la cancha 1. Al fin los muchachitos llegaron, y Resto dispuso su formación titular en el campo de juego: Alca; Mula-Chulo-Musgo; Ferka-Bollo-Manu; Pablo-Millo. Formación clásica, que ve pocas variantes de un partido al otro, y eso repercute positivamente. Después de un par de cotejos de ausencia, el Mago volvía a cubrir la banda izquierda del mediocampo, y así el fútbol podía respirar tranquilo por haber recuperado a uno de los que mejor homenaje le rinden. Después de toda esta pomposidad, pitazo inicial, y comenzamos a relatar lo que aconteció en el terreno de juego.
De arranque, exceptuando los primeros dos minutos en los que tras sacar del medio el rival mantuvo la pelota en su poder con prolijos y pacientes toques en su zona defensiva, Resto iba a hacer lo que mejor le está saliendo este año: madrugar al rival. Recuperando la pelota en mitad de cancha, el equipo negro y blanco encontraba un buen funcionamiento en mitad de cancha y más adelante, con un Pablo más generoso que otras veces (algo que se repitió en los últimos encuentros), un Ferka incisivo como siempre, y un Manu lúcido que profundizaba por la izquierda. Así, tocando una, dos, tres veces, se generaba peligro. Pablo tuvo la primera del partido cuando recibió cerca del área, jugó una falsa pared para enganchar hacia su izquierda y definir con la pierna zurda, aunque su remate fue desviado al lateral por el arquero. De ese centro desde la izquierda, bien pasado, llegó la apertura del marcador. Todos la vieron volar por sobre sus cabezas. Todos excepto el mariscal zancudo, quien entrando libre de marcas, no tuvo más que interponer su pierna derecha para inflar las mallas y desatar así un muy mesurado grito de gol. Con la ventaja a favor de Resto, todo se hizo más sencillo. El rival no inquietaba mucho, y nuestro querido team, si bien no monopolizaba la pelota, llegaba con más claridad en ataque. Un tiro libre que se perdió a un par de metros por el segundo palo fue lo más claro que tuvo Resto aparte del gol. Millo aprovechó para calentar un poquito el partido en un roce, pidiéndole a un rival que “no sea mal perdedor” (sic). En los últimos cinco minutos de la primera etapa, Chiribabuza insinuó mucho más peligro en las cercanías de un muy seguro Alca. Así fue que en la última jugada de esa primera etapa, un centro al área no puede ser despejado ni por Ferka ni por Peralt, y le queda servida a un rival sin marcas en plena área chica, quien debe definir de espaldas, como puede. Afortunadamente para nuestros intereses, el tiro no llevó la suficiente dirección, y mediante una atinadísima respuesta de Alca, pudo ser alejado el peligro de la meta. Final del primer tiempo, vamos a la pausa, ya regresamos.
Con la misma alineación, y la premisa de mantener el desarrollo del partido (exceptuando los últimos minutos), Resto salió a la cancha a disputar los últimos 20. Para ser sinceros, no pasó demasiado en el partido. El rival intentaba pero no sabía cómo. Lo más peligroso vino cuando Peralt cometió uno de sus conocidos foules de pelota llovida, por usar los brazos más de lo debido, y le entregó un tiro libre peligrosísimo al contrario en la puerta misma del área. Afortunadamente, la globa se desvió en la barrera y se perdió al tiro de esquina. Una seguidilla de centros hizo tambalear la integridad del triunfo de Resto, aunque afortunadamente la defensa se plantó firme (y no tanto, preguntar por La Mula…), el Alca respondió a la altura, y el sacudón pasó. Así, Pablo recupera en 3/4 de cancha una pelota, y encara en dirección recta hacia el área. Con mucho criterio, ve pasar a su izquierda a Manu, quien desborda y mete un centro por bajo, a rastrón, como indican los manuales del buen fútbol, para Millo que entraba por la derecha, y con el arco a su merced, no tuvo más que definir a la red. En realidad, primero al palo. Pero fue gol, golazo de Resto, que así aseguraba un costoso triunfo, y 3 puntos que valen oro. De aquí hasta el final, el equipo aprovechó para meter un par de variantes que le dieran oxígeno y piernas frescas al equipo. Ingresaron Boto y el Cabe en reemplazo de Millo y de Manu, dos puntos altos en el rendimiento de un equipo sin fisuras. Mientras tanto, Chiribabuza se hundió en su propia impotencia ofensiva, Resto mantuvo el partido donde más le convino, y llegó el pitazo final de un discreto juez.
Así llegamos al epílogo del match, con un triunfo 2x0 que sirvió para afirmarse como puntero y SERIO candidato al Scudetto en la máxima categoría. De aquí hasta el final, quedarán 5 encuentros, algunos más duros que otros, pero todos con la misma premisa: la de ganarlos y a fin de año poder festejar dando otra vuelta olímpica. El equipo es consciente de que se ha sacado de encima a los pesos más pesados del torneo, y que deberá mantener la puntería frente a varios de los cuadros que animan la zona baja de la tabla. No será una tarea sencilla (se recuerda que se dejó escapar un punto en el empate sin goles ante el alicaído MVN), pero sí altamente realizable. Lo importante es que el equipo está afianzado, sacó chapa de equipo grande, ganador contra cualquiera, que se anima a jugar, sale a ganar y no es menos que nadie. Este domingo deberá enfrentar a Myung-ki, bicampeón en ejercicio de la categoría, aunque de campaña irregular en este 2008. Otros 3 puntos darían una enorme tranquilidad de cara a la fecha libre y al clásico que se avecina, al mismo tiempo que servirá para sacarles ventaja a varios de nuestros perseguidores, que esta fecha deben enfrentarse entre sí. Depende de la actitud y del fútbol que proponga este equipo para hacer historia grande.

Ante todo, perdón por la demora y lo conciso del texto. Igual el partido no daba para mucho más. Se despide de Vds, Pablo Américo B.

Uno x Uno

Alca (7): muy seguro, cortó centros, no tuvo fallas, y tapó una pelota decisiva al final del primer tiempo.

Mula (6,5): bien, con firmeza como a lo largo del torneo, aunque con algunas pequeñas falencias, como meter un cierre a contramano o perder la marca en un par de ocasiones.

Peralt (7): hizo el gol de la apertura y sacó todo de arriba, aunque cometió varios de esos foules innecesarios que se tradujeron en peligro para el rival.

Musgo (6,5): salvo terrible pifia al comienzo del encuentro, la garantía de siempre. Pegó cuando tuvo que hacerlo y fue voz de mando cuando quedó de líbero.

Ferka (6,5): va, viene, va, viene. No se cansa nunca y es salida permanente, además de dar una mano importantísima en defensa, aunque no fue el partido donde más entró en juego.

Bollo (7): de buena labor tanto en defensa como en ataque, sigue siendo uno de los más regulares del equipo. Mandó el centro del primer gol y tuvo un tiro libre que pasó cerca. Está al caer su debut en las redes. (cortesía de Musgo; ya va a llegar una crónica tuya Musgo!)

Manu (7,5): el mejor del equipo dentro un rendimiento general muy parejo. Siempre con criterio, siempre bien ubicado, siempre dando el toque correcto para terminar la jugada, como en el segundo gol.

Pablo (7): un titán molestando la salida de los rivales, inquietando en todo momento y jugando con criterio. Es peligro constante.

Millo (7): hizo mucho trabajo sucio (pegar codazos incluído) y se movió bien, tal es así que estuvo en el lugar indicado para facturar en el segundo tanto.

Boto y Cabe (-): entraron a jugar un ratito y se acoplaron bien al partido.

No ingresó: Santi.

Hinchada: la de siempre. Yamila (amuleto oficial), Carla (quien se autodesmitificó como yeta, aunque sin recibir una aprobación unánime por parte del plantel) y el Papu que alentó desde afuera como cada domingo del señor. Ellos también son parte de Resto.